Yo antes, solía esforzarme por no perder a la gente, intentar complacerles, hacer lo que fuera para no perderles, ¿pero sabéis? Eso no me hacía feliz. Ni tampoco me hizo feliz ver como aún así, casi todos se iban. Aunque diese lo mejor de mí, todos se alejaban... Todos encontraron a alguien mejor.
Y eso duele.
En vista de eso, decidí que ya no me esforzaría por conservar ninguna amistad ni ninguna especie de relación con nadie. Se que no es lo acertado; o darlo todo o no dar nada, pero yo soy así. Total, si di lo mejor de mí a algunas personas y se fueron, ¿por qué con otras va a ser distinto?
Simplemente he decidido aceptar que todo el mundo se irá. ¿He hecho amigos nuevos? Genial, me alegro. Pero seguro que se irán, seguro que se olvidaran de mí. ¿Alguien dice quererme? Guay, yo también te quiero. Pero no hay nada que destacar en mí, no tengo ningún talento. Hay millones de personas mejores que yo, también te irás.
Y si alguien decide irse, por mucho que me duela, no le pararé ni le diré nada, simplemente aceptaré que se vaya.
Incluso, si llegó a querer mucho a alguien puedo llegar a no expresar todo el cariño que siento hacia ella para que crea que no la quiero y se vaya para evitar encariñarme con ella para que luego desaparezca, o también trato de decirle que no la necesito o cosas así, para que, por mucho que me importe, pueda irse lo antes posible de mi lado. Antes de que la quiera tanto, que tenga que llorar en su partida.
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