Oye, no sabes cuánto me alegro de que sepas pasarlo bien y estar bien sin mi ya que estoy lejos, y no por ello te pido que vivas triste hasta que pueda estar a tu lado.
O al menos eso intento, alegrarme. ¿Pero sabes? A veces es difícil. Solo un poquito, un poquito que esconde un mucho.
Ya sabes, hay días que sales a menudo, que no puedo hablarte, que te despides de mi a toda prisa, que parece que lo único que deseas es dejar de hablarme porque te espera algo maravilloso ese día, algo maravilloso en lo que yo no estoy incluida. Sé que te encantaría que estuviese, o eso quiero pensar, pero no soy yo quien esta a tu lado. Son otras personas, no yo. Pueden verte y estar contigo, y yo que sé si lo aprecian o no, pero daría mi alma a quién la quisiese solo por poder hacer yo eso un maldito día.
Y te juro que hay días que estoy mas mal de lo que parece por ese estúpido motivo, pero como sueles estar alegre y se que lo has pasado bien, creo que no es plan que te lo arruine así. Solo sería un estorbo, eh. Debes estar cansado de soportarme, ¿cómo es que sigues conmigo? A veces es solo como que quisiese que me consolases, porque estoy empezando a acostumbrarme a ello, pero a veces no lo haces. ¿Y para que mentir? Eso no me sienta mal, si no lo siguiente. Parece que poco a poco, estoy empezando a ser incapaz de soportar que no estés a mi lado, que lo pases bien sin estar yo ahí...
Aunque hay veces que no se ser fuerte, y te cuento lo que me pasa, lo mismo una y otra vez. Que tontería, ¿no? Lo siento. Trataré de no hacerlo mas.
No me siento mejor, ya no sé que escribir. Me he cansado. Voy a escuchar música.
